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Flora

El área definida por el Parque Nacional Rapa Nui no solo resguarda los restos arqueológicos de la cultura Rapa Nui, sino también el entorno natural y paisajes compuestos por flora y fauna que constituyen un ecosistema natural.

El patrimonio natural del parque está ligado con la tradición del pueblo Rapa Nui, cuyos relatos cuentan que el rey Hotu Matu’a habría traído consigo plantas de valor alimenticio, en su viaje de conquista. Sin embargo, algunos estudios han demostrado la presencia de variadas plantas, mucho antes de la llegada de los primeros colonizadores polinesios, las cuales se encuentran extintas o bajo fuerte presión. Se consideran como principales amenazas las plantas invasoras, los incendios, el avance de la agricultura y el pastoreo en ecosistemas frágiles.

Según datos de la CONAF, la flora nativa actual de Rapa Nui es de aproximadamente 48 especies, de las cuales 11 son endémicas. Si bien los registros dan cuenta de una isla que albergaba una importante presencia de plantas y árboles, asociado a ello fauna característica del lugar, la degradación ecológica producto de la intervención humana, redujo considerablemente la presencia de especies endémicas.

Una de las características generales de la flora en Isla de Pascua es que no fue abundante, en comparación con otras islas de la Polinesia. Según los registros, la isla poseía alrededor de 14 especies arbóreas y gran cantidad de arbustos. Actualmente, Isla de Pascua está principalmente cubierta de praderas en las que se encuentran algunas especies nativas y otras introducidas. Dentro del Parque se encuentran algunos sitios con valiosa presencia de especies vegetales como helechos y gramíneas

Dentro de la organización del Parque Nacional Rapa Nui, el vivero “Mata Veri Otai” cumple un rol fundamental en la protección de la flora de Isla de Pascua, contribuyendo a su desarrollo integral y sustentable. Entre sus acciones está producir y propagar plantas endémicas, nativas e introducidas, conservar la flora nativa y endémica, educar a la comunidad y visitantes de la isla en temas relacionados con la flora y el suelo, suministrar asistencia técnica y capacitación a particulares y organismos ligados a los recursos naturales, controlar la erosión y recuperar suelos, entre otras tareas.

Toromiro (Sophora toromiro): es conocido por ser el único árbol endémico de Rapa Nui. Su madera fue muy apetecida por los escultores para el tallado de objetos ceremoniales o rituales como Moai Kavakava, Reimiro, Tahonga, Ua y Rapa. Fue exterminado por su sobreexplotación y se encuentra en extinción en su forma silvestre de propagación, sin embargo, actualmente está siendo reintroducido en la isla, tras recuperar ejemplares en jardines botánicos y viveros, a partir de algunas semillas recolectadas a comienzos del siglo XX

Hau Hau: otra planta autóctona que está en estado de extinción en zonas silvestres. Se encuentra en América tropical y fue introducida en muchas islas del Pacífico. Las semillas podrían haber sido traídas por aves migratorias. Según la tradición oral, forma parte de las especies traídas por Hotu Matu’a, sin embargo los estudios de palinología dan testimonio de la presencia del género Triumfetta mucho antes de la llegada del hombre. La corteza se utilizaba como fibra vegetal para la elaboración de cuerdas y cordeles, y su madera habría sido apreciada para la construcción de embarcaciones. Se encuentra en lugares abiertos y rocosos del Rano Kau, entre los 110 y los 250 metros de altura.

Pua nako nako: arbusto de hojas carnosas, flores color lila y frutos pequeños de color naranja o rojo. Probablemente sus frutas se consumían tal como en Rapa, Polinesia Francesa. Se estima al menos 200 individuos en el medio natural. La poca regeneración natural y el tamaño limitado de su distribución, lo clasifican en peligro de extinción en Rapa Nui.